Abstract
El Carnaval de Barranquilla, en sus más de 200 años de historia, ha sido fuente de inspiración para
músicos, escritores, dramaturgos, artistas plásticos, cineastas y objeto de estudios históricos, sociológicos, antropológicos y recientemente económicos, teniendo en cuenta lo que potencialmente representa en la economía naranja como gran industria creativa que contribuye
hoy con las finanzas territoriales y el desarrollo humano de Barranquilla y el departamento del Atlántico.